El propóleo o própolis es una sustancia elaborada por las abejas a partir de resinas y que se extrae de sus colmenas, donde se encuentra en las paredes para mantenerlas libres de bacterias.
Sus propiedades en el ser humano son antibacterianas, antivirales, inmunoestimulantes, antiinflamatorias, cicatrizantes y ligeramente analgésicas.
Se recolecta al comenzar la primavera y separa el propóleo de la cera, hasta obtener una sustancia granulosa y ligeramente oscura, con un sabor fuerte e intenso.
Por ello, se recomienda para problemas de garganta, boca y vías respiratorias, estómago y colon, ginecológicos y dermatológicos.
Y así prevenir anginas, faringitis, laringitis, aftas bucales, muguete y abcesos, resfriados, cándidas, llagas uterinas, inflamaciones vaginales y combatir la bacteria “Helicobacter Pylori” principal responsable de la úlcera gástrica, diverticolitis, gastritis, enfermedad de Crohn o diarrea de candidiosis intestinal y las micosis u hongos de la piel e incluso el acné o los sabañonesa.
¿Cuales són las formas más utilizadas?
Los adultos lo consumen en forma de extracto, aceites, comprimidos y cremas, durante la época invernal, para fortalecer sus defensas.
Pero dado su sabor fuerte, PropolBaby ha ideado para los más pequeños dos maneras divertidas y con buen sabor de fortalecer las defensas naturales del cuerpo de los niños en periodos invernales, dos integradores a base de própolis, echinacea, elicriso, acerola y miel.
- Jarabe con agradable sabor a fresa.
- Ositos masticables aromatizados a la fresa.
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