El cuerpo humano está compuesto de un 50 a 65% de agua, por esto es justo decir que el agua es esencial para nuestra vida. Sin él, nuestros cuerpos no podrían funcionar, y dejarían de existir. Es más, nuestro cuerpo no puede sintetizar agua por su cuenta, así que la tenemos que tomar a través de los alimentos que comemos y los líquidos que consumimos. A pesar de que el agua no es realmente un alimento, pensamos que su importancia para nuestra dieta hace que sea el más «importante» de todos.
Aquí tenemos 4 razones por las es aconsejable beber más agua:
- El agua puede ayudar a obtener mejores resultados de sus entrenamientos,
Cuando estamos deshidratados, nuestros cuerpos se cansan mucho más rápido porque hay menos oxígeno que puede llegar al cerebro. Esto hace que el corazón tenga que trabajar más duro. El agua ayuda a mantener el flujo de sangre y trabaja para lubricar las articulaciones y los músculos, evitando calambres y permitiendo trabajar más tiempo y más duro. - El agua limpia el cuerpo de toxinas,
Cuando las células están hidratadas, se expanden, se vuelven activas y se depuran espontáneamente de residuos y toxinas, consigue que la circulación de sangre fluya de modo más limpio. Además, cuando las células de la piel se llenan de agua, ayudan a reducir las arrugas y otros signos de envejecimiento, es imprescindible para mantenerse joven. - El agua es un reductor de estrés,
Cuando se trata de estrés, el agua es un aliado definitivo. La investigación ha demostrado que cuando el cuerpo está deshidratado, este produce más hormonas de estrés. Mantenerse hidratado es una forma natural de ayudar a nuestro cuerpo a reducir el estrés del día a día. - El agua suprime el apetito,
Y puede ayudar a perder peso. Los estudios han demostrado que el agua puede ayudar a suprimir el apetito, a sentirse más satisfecho comiendo menos. Beber un vaso de agua antes de las comidas puede ayudar a limitar el número de calorías que usted toma. Además, el agua aumenta el metabolismo, lo que permite a su cuerpo a quemar más calorías, en lugar de almacenarlas como grasa.
Fresca, del tiempo, del grifo o mineral, con o sin gas… sea como sea, el agua debe ocupar un lugar de honor, para tener una hidratación diaria adecuada, sobre todo en verano, os contamos lo que hay que saber para evitar deshidratarse y no peder ese equilibrio:
Existe un método muy práctico para saber si estamos reponiendo los líquidos corporales de manera correcta y consiste en observar el color de la orina. Si la orina es oscura y escasa, significa que la concentración de desechos es alta y por consiguiente debemos beber más agua. Cuando la misma es clara y abundante nuestro equilibrio hídrico es adecuado.
