Empezamos Mayo, una época de cambios, mucha vida y un mes lleno de sorpresas, retos y por que no… de regalos. No puedo resistirme al esplendor de la naturaleza en Mayo, por muchas razones… me las reservo para otro día.
Nuestro organismo, como parte del entorno, también se altera y reacciona, los aceites esenciales con su gran dinamismo biológico nos ayudan a mantener y conservar la vida.
La inhalación de los aceites esenciales estimulan el órgano olfativo, las emociones del cerebro, se transmiten por todo nuestro organismo, incluyendo las áreas psicológica y espiritual, en fin… es todo un placer a nuestro alcance, y también solucionan los pequeños transtornos que nos suelen aparecer en esta época del año, por ejemplo en Primavera son habituales las afecciones de la piel y el sistema nervioso.
Descubre a estos «pequeños ayudantes» para tu bienestar, los aceites esenciales de:
-Manzanilla
-Lavanda
-Geranio
-Rosa
regulan el sistema endocrino, mejoran las alergias, los eczemas, las dermatitis y cuidan la piel reseca. También calman el sistema nervioso, especialmente sensible en este mes de cambios.
El uso de los aceites esenciales es simple, en difusión (vaporizados, inhalados o impregnados sobre un pañuelo), en el baño…, en masaje, y cuando se aplican sobre la piel puede añadirse a un aceite vegetal o crema. Los aceites esenciales se conservan bien unos 3 años, protegidos de la luz directa y en frascos bien cerrados.
Pues hasta aquí mi aportación en este primer domingo de Mayo.
